lunes, 8 de agosto de 2011

10 Recomendaciones para retener el Talento


A pesar de la situación económica actual, donde hay más posibilidades de reclutar y seleccionar personal, los responsables de recursos humanos no deberían descuidar el deber de retener, motivar y formar a sus empleados porque sigue siendo difícil obtener recursos humanos cualificados. El talento, en términos generales, es un factor escaso, que hay que saber buscar, captar y, sin duda, retener.

En este escenario, los responsables de recursos humanos tienen que convertirse en piezas claves y estratégicas para saber mantener dentro de la organización, a los mejores.
Recomendaciones:

1. Fomente un buen clima laboral.
El ambiente laboral es un factor vital y decisivo a la hora de que los empleados decidan permanecer o abandonar una organización. Las personas buscan un contexto en el que puedan entablar relaciones sociales, mantener una buena relación con la Dirección de la empresa, y a la vez, lograr sus objetivos profesionales. El desconocimiento del ambiente en otras empresas juega a favor si en nuestra empresa es óptimo.

2. Forme y Desarrolle a sus empleados.
Los empleados con talento requieren de constantes retos para progresar. Además, la formación es uno de los aspectos más valorados por todos los empleados.

3. Diseñe Planes de Carrera.
Es muy importante que los empleados sientan que evolucionan y crecen procesionalmente, que detrás hay un plan de carrera. Tenga en cuenta que una de las mayores causas de salida de un empleado es el estancamiento laboral, o la imposibilidad de mejora profesional. Por ello, será primordial mantener a esos profesionales destacados y  satisfechos con su puesto de trabajo, garantizándoles que tendrán la posibilidad de alcanzar nuevas responsabilidades.
  
4. Reconozca a sus empleados.
Lo importante es que el reconocimiento sea personalizado, y de acuerdo a las necesidades de cada trabajador, ya que no todos tienen las mismas motivaciones. Es importante pensar más allá del reconocimiento económico. 

5. Comuníquese con sus empleados.
 Es importante que el empleado sienta que existe una buena política de comunicación interna en la empresa, que sienta que está integrado en la medida en que advierta que sus ideas, opiniones y sugerencias son tomadas en consideración. De este modo, sentirá que tiene un lugar que le pertenece y que puede colaborar activamente en el cumplimiento de las metas de la organización. Es muy importante hacer participar a los empleados en las decisiones empresariales.

6. Desarrolle políticas de Conciliación e Igualdad de oportunidades.
Los trabajadores valoran cada vez más las políticas de conciliación de vida familiar y laboral. Medidas como los horarios flexibles de entrada y de salida, la flexibilidad para elegir vacaciones, la posibilidad de trabajar desde casa con dispositivos móviles, etc.

7. Escuche a sus empleados y resuelva sus inquietudes.
Los trabajadores deben saber a quien dirigirse cuando tienen una inquietud y la empresa debe de poner medios y herramientas para ello. Por otro lado, es labor de RRHH intervenir de forma proactiva para evitar conflictos laborales.

8. Desarrolle el sentimiento de pertenencia a la empresa.
Organizar actividades para fortalecer el sentimiento de pertenencia como excursiones, viajes, actividades deportivas, concursos, etc, pueden ser momentos idóneos para relacionarse con los empleados e incluso con los familiares de los mismos. Puede ser un buen momento también para conocer las preocupaciones y necesidades de los empleados.

9. Trabaje la marca de su organización.
Una de las claves para captar y retener el talento consiste en construir una “marca” que destaque a la empresa como buena empleadora. Para ello, es importante que la compañía tenga bien definida una buena cultura organizacional, generando valores comunes y un sólido sentido de pertenencia.

 10. Entreviste individualmente a sus empleados y formule nuevos proyectos.
Un reto de la Dirección de la empresa y de los profesionales de RRHH es el de lograr comprometer a los empleados en proyectos que ellos mismos hayan formulado. Esto permitirá mantenerlos en la empresa y convertirlos en emprendedores corporativos. No sólo es necesario formular nuevos proyectos, sino que también es recomendable plasmar en una entrevista individual, por ejemplo, de desempeño, los logros obtenidos, las posibles mejoras y los objetivos para el nuevo año.

En definitiva, trabaje para que su  organización permita al empleado combinar retos y oportunidades de formación y desarrollo, proporcionar un balance entre vida laboral y familiar, fomentando un ambiente estimulante y una cultura de confianza.

martes, 2 de agosto de 2011

5 Recomendaciones para mejorar el Absentismo



Con crisis o sin ella, el absentismo sigue situándose como uno de los principales problemas que deben afrontar las empresas, ya que además de acarrear costes, genera anomalías en los procesos de trabajo. Os propongo 5 recomendaciones para mejorar el absentismo:

1. Cuente con indicadores.
Disponer de datos estadísticos para medir las tasas de absentismo permite analizar la problemática y detectar la posible existencia de causas que se repiten. La idea es registrar y segmentar la información por tipos de absentismo y cruzarla con diferentes criterios de corte organizativo (centro de trabajo, puesto…), personales (sexo, edad…), relacionados con su distribución en el calendario (mes del año, día de la semana…), con cargas familiares (ascendientes y descendientes a cargo…), entre otros.

2. Compare esos indicadores.
No sólo es útil medirlo, sino que también debemos de compararlo con empresas afines del mismo sector. Esto nos permitirá clarificar nuestro diagnóstico y la información obtenida en el análisis.

3. Conocer los tipos de absentismo.
No todos los absentismos pueden ser gestionados de la misma forma, por lo que si se establece una serie de perfiles tipo,  podrás poner en marcha las acciones correctoras más adecuadas a cada situación. En esta etapa los mandos intermedios cumplen con un rol fundamental, pues tienen contacto directo con los empleados y son quienes prestarán una mayor ayuda para identificar cada caso. Los perfiles son:
  • Absentista “involuntario”. Se trata de aquél que por diferentes razones psicosociales o de salud se ve obligado a ausentarse de su puesto de trabajo por una causa debidamente probada.
  • Absentista “discontinuo”. Se caracteriza por pequeños absentismos, como retrasos en la llegada al trabajo, ausencias de corta duración pero frecuentes, etc.
  • “Presentista”. Aquel empleado que aunque acude a su puesto de trabajo no tiene el rendimiento adecuado al nivel de exigencia requerido, pues dedica parte de su jornada laboral a temas no relacionados con su puesto (por ejemplo, temas personales, etc.). Especial relevancia adquiere para este tipo de absentismo el tan discutido uso de las redes sociales en tiempo de trabajo.
  •  Absentista “fraudulento”. Es aquél que de manera continua no acude a su puesto de trabajo aduciendo razones que no tienen una justificación suficientemente fundada.
4. Tenga en cuenta acciones correctoras.
No se trata únicamente de medidas coercitivas y sancionadoras, sino también de medidas que motiven al empleado y le ayuden a mejorar su implicación en el trabajo. Algunas de estas acciones son:
  • Identificar la causa y el trabajador y aplicar medidas ejemplarizantes es lo más recomendable en los casos de absentistas fraudulentos.
  • Las políticas de gestión por objetivos, con tiempos y metas bien establecidas, son las más indicadas para minimizar el presentismo, porque ayudarán a que el empleado se centre en su trabajo y a que la compañía pueda detectar cualquier dificultad en la ejecución de las tareas. Además de evitar las pérdidas de tiempo involuntarias también harán que salgan a la luz aquéllas que sí lo son, propiciando la eliminación de las primeras y penalizando las segundas.
  • El análisis de pautas en el caso del absentista discontinuo arrojará luz sobre si se trata de uno fraudulento o si existen razones de fondo para que no acuda a su puesto de trabajo. A veces, estas ausencias tienen que ver con factores psicosociales tales como cuidado de ascendientes, hijos, distancia al centro de trabajo, etc., que se pueden corregir con medidas como el teletrabajo, reducciones de jornada o jornadas continuas, entre otras.
5. Evaluación y seguimiento.
Según los indicadores y acciones definidas, los responsables de recursos humanos y los mandos intermedios deben revisar y controlar los resultados de modo que puedan realizar un seguimiento adecuado de la efectividad de las medidas adoptadas.